viernes, 2 de noviembre de 2012

¿La Transición fue un cambalache?

En estos últimos años se ha extendido mucho entre la gente de izquierda la idea de que la Transición fue un cambalache que silenció tácitamente el recuerdo. Estoy dispuesto a aceptar que hubo un cierto cambalache. Pero, la verdad sobre la Guerra Civil, y sobre otras muchas cosas, la hacemos entre todos -como decía Machado-, es algo pactado. Los demócratas, no los franquistas, acordaron en 1975 aparcar el pasado porque se jugaban mucho para el futuro. Treinta años después, cuando ese futuro parece razonablemente consolidado, se vuelve a la memoria, justamente porque ya no es tan traumático, -antes medio país estaba en contra de las exhumaciones de las fosas, pero ahora nadie se opone, todo el mundo lo ve natural- y porque hay todavía muchas zonas oscuras de ese pasado que conviene saber. La memoria es fundamental para conocer la verdad, y sin verdad no es posible la justicia, y sin justicia no es posible la reparación: esto es incuestionable. También sin el olvido no es posible la paz. El pasado es una construcción y la memoria una proyección de aquello que deseamos,  por eso debemos recurrir a la racionalidad y a la Ilustración para poder avanzar, sino queremos parecer trogloditas. De todo esto se habla en la novela de Andrés Trapiello, “Ayer no más”, editada por Destino, en la que propone una honda reflexión sobre la memoria y el olvido. Un equilibrio complejo, siempre inestable, en ocasiones desconcertante y a ratos aparentemente imposible, pero muy necesario para poder vivir en paz. Pepe Pestaña (el historiador que protagoniza la novela de Trapiello), dice algo rotundo: “No te creas lo primero que te cuentan, pero no quieras ser el último en contarlo”. Y es que ni siquiera podemos creer lo que nos contaron en casa, ya que muchas veces nuestros padres mintieron o callaron por miedo. Ahora, 70 años después entre todos debemos construir la verdad, porque nadie quiere ser ya el último en contar la verdad y, sobre todo, en tener la razón.
Ángel Luis Jiménez Rodriguez

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