sábado, 15 de enero de 2011

La prescripción de los delitos fiscales y sus consecuencias.

El Partido Popular, cuando gobernaba, acortó los plazos de prescripción de los delitos fiscales,  delitos en los que incurren los ricos y no los pobres. ¿Por qué lo haría? Ahora, un auto de la Audiencia Provincial de Castellón declara prescritos cuatro de los cinco delitos fiscales por los que estaba acusado el presidente de la Diputación Provincial, Carlos Fabra. Antes, ya lo habían hecho con el vicepresidente del Gobierno de Canarias, José Manuel Soria, también del PP. El portavoz de este partido, Esteban González Pons, nos dice que son: “buenas noticias para la presunción de inocencia”, pero es que los tribunales no han dictaminado la inocencia de nadie, sólo han constatado, independiente de los claros indicios de criminalidad, que los posibles delitos han prescrito. Un delito puede prescribir o caducar, entre otras razones, por falta de diligencia de los juzgados, la moralidad no, así que no intenten ligar la honradez con la prescripción de un delito. Un delincuente no deja de serlo por prescripción, es una argucia legal y estúpida. No será culpable por la vía penal, pero nadie podrá disputarle ese título por la moral. Ahora, estos prescritos delincuentes podrán volver a optar a la reelección de sus cargos públicos tranquilamente, pero no con la conciencia limpia, si es que la tienen. ¡Qué tiempos estos en que los delitos no lo son por cuestión de tiempo y dinero!
María José Jiménez Izquierdo

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