David Anisi, Catedrático de Fundamentos del Análisis Económico de las Universidades de Salamanca y Madrid, decía antes de fallecer en 2008, que la economía más que una ciencia o un arte era un conjunto de medios más o menos sofisticados en el combate ideológico por el poder. Y advertía que en ese combate se usa el término mercado para referirse a cualquier problema social, ya fuera el mercado de trabajo o el de los servicios públicos. Por tanto, en este combate ideológico por el poder, la estrategia consiste en calificar como mercados el trabajo, la sanidad y la educación. Después, se insiste en la búsqueda de la eficiencia. Y por último, se nos dice que la única solución para mantenerlos funcionando de forma eficiente es flexibilizándolos, reestructurándolos y redimensionándolos. En definitiva, hacerlos más eficientes -palabra milagrosa y de actualidad para políticos y economistas en todos sus discursos-, porque si no estamos obligados al copago o a la gestión privada. Quieren imponernos unas políticas económicas en las que nada debe ser gratis. Los servicios debemos pagarlos en función de su uso, aunque paguemos también nuestros impuestos. Nos quieren vender estas políticas con un sugestivo discurso cargado de dosis ideológicas. Pero, ¿vamos a comprarlas? ¿Dónde están en este sistema valores tan universales como la igualdad, la solidaridad y la libertad para decidir o elegir? No les creamos, ni les hagamos caso, hay que luchar sin miedo en este combate ideológico.
Ángel Luis Jiménez Rodriguez
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